El día que dejó de nevar en Alaska Alice Kellen

Heather, una chica de San Francisco que por un impulso y culpa se mudó a una cabaña en Alaska. Su vecino John, un vecino muy atento con ella, le proveía lo que necesitaba como leña y comida, él se dedica a entrenar perros para mushing. Caos, un perro que es leal y solo obedecer a Heather la acompaña en toda la historia; juntos entrenan para canicross. Heather entra a trabajar en como mesera en un restaurante donde conoce a Seth. Un muchacho muy alegre y carismático que se casa con Nijaa, una joven con un carácter muy similar al de él. También, conoce a Nilak, (trozo de hielo). Siqiniq (el sol), cuyo apodo son del idioma inuit, se lo pone la señora Naaja, una persona que pude leer a otras y de ahí les pone los sobrenombres.

La historia se desarrolla, pero con escritos intermitentes de un diario, hablan sobre una joven pareja, Kayden y Annie, muy diferentes en cuanto a formas de ser, sin embargo, enamorados a tal grado de querer compartir el resto de su vida juntos.

Al principio, no le encuentras sentido entre la relación del diario con la historia principal, hasta que en el libro se muestra que Nilak es el sobrenombre para Kayden y nos muestra que Annie es la hija fallecida de John.

“Por fin «Nilak» tiene sentido. Sí, es un «trozo de hielo», pero no porque sea frío, sino porque es transparente. Naaja tenía razón. Algunas personas solo son opacas para protegerse, pero la capa es muy fina y, al romperse, no da paso a más oscuridad, sino a la claridad. Observo los destellos que la luz dibuja en el hielo y se me remueve algo en el pecho cuando advierto que quizá sea cosa del destino, porque tiene sentido que Siqiniq, el sol, haya terminado por derretir esa coraza”.

Así se ven los copos de nieve - Chismes Today

Comments

Popular posts from this blog

Lord of the Flies

Nosotros en la luna Alice Kellen